sábado, 4 de enero de 2020

El ruido de los juguetes puede causar lesiones irreversibles





Acaban de pasar las fiestas más ruidosas del año y el ruido es uno de los principales problemas que, aunque no lo vemos lo tenemos en épocas navideñas y fin de año, los más pequeños no saben aún que es la salud auditiva, cuanto más ruidosos sean los juguetes para ellos mejor. Entre los potenciales peligros figuran coches con sirena, muñecos que bailan que tienen música estridente, armas sonoras o instrumentos musicales.

Esxisten juguetes que pueden afectar la audición de los niños si estos superan los 80 decibelios (dB).
La asociación estadounidense Sight and Hearing elabora todos los años su famosa lista de juguetes más ruidosos. Todos ellos superan los 100 dB cuando se colocan junto al oído.
Está comprobado que la pérdida de audición por ruido se acumula gradualmente a lo largo de los años. Los efectos no son inmediatos, pero sí irreversibles, se recomienda comprobar el sonido que emite el juguete antes de comprarlo. Se puede medir el nivel con aplicaciones móviles como los sonómetros. A la hora de elegir, mejor que tenga controles de volumen o interruptores de encendido y apagado. Luego, ya en casa, se debe evitar que los niños se acerquen los juguetes a los oídos. Otra manera de testar la amenaza es que si el sonido es muy fuerte para el adulto evidentemente también lo será para el niño.
Cuando no se puede limitar o controlar el volumen, existe un truco para reducir el nivel de sonido que consiste en colocar una cinta de esparadrapo sobre el altavoz.


Fuente: .audioprotesistas.org