lunes, 24 de septiembre de 2018

ESTIMULACIÓN CEREBRAL DE LOS APARATOS AUDITIVOS


ESTIMULACIÓN CEREBRAL DE LOS
 APARATOS AUDITIVOS

Un aparato auditivo sirve para algo más que para poder oír. Sirve también para que el cerebro recuerde los sonidos que no se pueden oír sin el aparato auditivo.
La mayoría de las veces, la pérdida de audición aparece sin avisar. De repente un día, uno se da cuenta de que ya no escucha el ronroneo del refrigerador ni el cantar de los pájaros.
Suele pasar una media de 10 años para que la persona con pérdida de audición haga finalmente algo al respecto. Muchas personas simplemente esperan que el problema auditivo desparezca. Esto raramente ocurre.
La pérdida de audición sin tratar afecta a la calidad de vida, pero también afecta a la capacidad del cerebro de recordar los sonidos cotidianos, ya que los “canales auditivos” ya no funcionan con eficacia.
Cuando los nervios auditivos pierden su función y ya no conducen las señales sonoras al cerebro, el cerebro “olvida” con el tiempo los sonidos y parece incapaz de comprenderlos.

Una vez que comienza la pérdida de audición, el centro auditivo del cerebro almacena los sonidos y los ruidos durante unos tres años. Sin embargo, a los siete años la memoria se hace cada vez más débil.
Por tanto, es importante realizarse una prueba auditiva y ajustarse los aparatos auditivos cuando se nota que se está perdiendo audición. Una vez que se coloca el aparato, se reanuda el proceso auditivo proporcionando las señales al cerebro.
Si el ajuste de los aparatos auditivos se retrasa demasiado, puede que ni siquiera el aparato auditivo sea capaz de transformar las señales sonoras que se reciben en información comprensible para el cerebro. Esto significa que el cerebro ya no reconoce los sonidos y ruidos cotidianos, como por ejemplo, el ronroneo de la nevera o de la computadora . El cerebro debe aprender a oír todo de nuevo.

Si tiene duda acerca de su capacidad auditiva, acuda con el especialista.

Fuente: diversidadauditiva

miércoles, 19 de septiembre de 2018

La revisión audiológica infantil, la importancia de realizarla


La revisión audiológica infantil es una cita obligada tras el verano. Durante esta época los niños se enfrentan a diversos factores de riesgo que pueden desembocar en una patología auditiva. Es por ello que resulta necesario contactar con audiólogos experimentados para prevenir futuras complicaciones.



Revisión audiológica infantil


En Audionova somos especialistas en audiología y contamos con aparatología avanzada para el diagnóstico y el posterior tratamiento de cualquier enfermedad auditiva.

Las principales amenazas contra la salud auditiva de tu hijo con el fin de que consigas evadirlas efectivamente.

Agua por todas partes. Las altas temperaturas hacen que nuestro contacto con el agua sea mayor. En la playa o en la piscina, las bacterias están presentes deseando atacar al oído. La inmersión completa en estos espacios aumenta la probabilidad de padecer enfermedades como la otitis. Consecuentemente se recomienda la utilización de tapones en aquellos infantes que están predispuestos a sufrirla o la han sufrido en el pasado.

Cambios de presión. A todo el mundo le gusta disfrutar de su tiempo libre, y a los pequeños más aún. Los desplazamientos en coche y en avión suelen venir acompañados de cambios de presión. Para eludir este grave efecto recomendamos espirar nasalmente o  goma de mascar.

Temperatura irregular. Es normal que nos refugiemos del calor utilizando sistemas de ventilación como el aire acondicionado. Sin embargo los niveles bajos de temperatura también favorecen la aparición de otitis. Por ello debemos esquivar los cambios bruscos de grados y refugiarnos en ambientes frescos pero no fríos.

Mantenimiento de la salud auditiva tras los cambios climáticos.

Con el fin de reducir la probabilidad de contagio de otitis y otras patologías auditivas, realizamos las siguientes recomendaciones.

Higiene auditiva. Hay que prestar especial atención a la higiene en los oídos de los niños. Si durante el verano han padecido otitis, los oídos tienen que mantenerse más limpios aún. Sugerimos utilizar sprays específicos en lugar de bastoncillos e impedir que los oídos se mantengan mojados.

Inspección desde el hogar. Como padres, debemos comprobar si nuestros hijos pasan por un problema auditivo. En ocasiones, los niños no exteriorizan ciertos síntomas ya que no los identifican como una enfermedad. Tenemos que estar especialmente atentos sobre si escuchan con normalidad o sufren de pérdida de capacidad auditiva.

Revisión audiológica infantil profesional, revisiones periódicas con el fin de llevar un seguimiento adecuado, y resolver las infecciones causadas los meses anteriores.

Si deseas una audiometría para tus hijos, visítenos y consiga que vuelvan al cole con más fuerza que nunca.

sábado, 15 de septiembre de 2018

Alimentos para cuidar nuestra audición


¿Qué dieta fortalece nuestro sistema auditivo?

Según el Dr. Joe McDermott, audiólogo y autor de un estudio publicado en The Daily Sentinel sobre la alimentación y la sordera, afirma que una dieta equilibrada y el consumo de ciertos nutrientes y vitaminas pueden retrasar e incluso prevenir futuras pérdidas auditivas.

La falta de consumo de ciertas vitaminas en la dieta puede provocar infecciones de oído, tanto en adultos como en niños, y a largo plazo, la aparición de enfermedades más severas en el oído.

De hecho, la investigación de McDermott demuestra que las personas que consumen dos o más porciones de pescado con Omega-3 por semana son un 42% menos propensas a desarrollar presbiacusia si se las compara con aquellas que no comen pescado normalmente.

 Vitaminas y nutrientes que cuidan nuestro oído


Los alimentos que contienen ácidos grasos como el Omega-3 ayudan a fortalecer los vasos sanguíneos del oído interno por sus propiedades antiinflamatorias: pescados como el salmón, el atún o las sardinas, el aceite de canola, las nueces o alimentos enriquecidos con Omega-3 como la leche o los huevos.
El ácido fólico (Vitamina B) ayuda a nuestro cuerpo a fabricar células rojas en la sangre y son muy recomendables para fortalecer la salud auditiva: cereales y legumbres como los garbanzos o las lentejas.
La Vitamina C, aparte de ser útil para los resfriados, también influye positivamente en la salud de nuestros oídos: frutas como el kiwi, naranjas, tomates y fresas o verduras como el brócoli o las coles de Bruselas.
La Vitamina A es beneficiosa para la salud del oído interno ya que ayuda a la formación y al mantenimiento de tejidos blandos y óseos: verduras de hojas verdes como la espinaca o la lechuga romana y hortalizas como la zanahoria, el pimiento rojo, el pimentón o la calabaza.
La Vitamina E tiene un efecto antioxidante que nos ayuda a eliminar todo aquello que nuestro cuerpo no necesita y a generar mayor número de glóbulos blancos. Es muy recomendable consumir este tipo de alimentos para prevenir la pérdida de audición asociada con la edad: acelgas, aguacate o frutos secos como las nueces o las almendras.
Los alimentos con Zinc refuerzan las defensas de nuestro organismo y protegen el oído retrasando la aparición de pérdidas auditivas: ciruelas, chocolate negro, ostras, cangrejos o arroz integral.
Las fuentes de Magnesio son beneficiosas para prevenir problemas auditivos causados por el ruido: maíz blanco, arroz integral, frutos secos o caracoles.
Todos estos alimentos en ningún caso eliminarán ningún tipo de pérdida auditiva pero, mantener una buena alimentación y seguir una serie de consejos para cuidar el oído, pueden fortalecer nuestro sistema auditivo. No obstante, si notas que tu capacidad auditiva disminuye repentinamente consulta a tu médico especialista.

fuente: kiversal.com