martes, 24 de septiembre de 2019

Semana Internacional de la persona sorda: la importancia de identificar las dificultades audiológicas en forma temprana




La hipoacusia es la disminución de la percepción auditiva, la vía habitual para adquirir el lenguaje. Se trata de un problema de especial importancia en la infancia, pues el desarrollo intelectual y social se encuentra relacionado con una correcta audición. La audición, junto con el resto de los sentidos, permite el establecimiento de las relaciones sociales y con el entorno. Es uno de los principales procesos fisiológicos que posibilitan a los niños el aprendizaje, siendo de suma importancia para el desarrollo del pensamiento.

El principal objetivo de conmemorar esta Semana Internacional de la Sordera -del 24 al 28 de septiembre– es concientizar sobre la detección de la existencia de trastornos auditivos antes del primer mes de vida, confirmar el diagnóstico de hipoacusia a los tres meses y realizar una intervención temprana y rehabilitación auditiva antes de los seis meses de edad.





Estadísticas

La incidencia de la hipoacusia, según datos de la Organización Mundial de la Salud, se sitúa en cinco de cada mil nacidos. La incidencia de hipoacusias leves a moderadas es de cuatro por cada mil recién nacidos, y las hipoacusias severas o profundas afectan a uno de cada mil recién nacidos. Para tomar dimensión, en los hospitales dependientes de CABA nacieron durante 2017 aproximadamente 68.000 niños.


Siguiendo la incidencia estadística de la OMS podríamos decir que nacieron en ese período 108 niños con hipoacusia severa o profunda y 432 niños con hipoacusia leve o moderada. El momento de aparición de la hipoacusia y su detección precoz es fundamental para el pronóstico y la calidad de vida del niño. Los tres primeros meses de vida son especialmente importantes para el desarrollo de las vías auditivas. La identificación de la hipoacusia y la intervención temprana se asocian con un mejor desarrollo del lenguaje hablado.



La estimulación auditiva, audífonos y, desde hace algunos años, implantes cocleares, pueden revertir los problemas auditivos en los chicos y ayudarlos a tener una vida similar a la de otros de su edad. Para que los resultados sean óptimos es fundamental que los tratamientos se inicien, si es posible, durante el primer año de vida. Cuando el audífono convencional no es suficiente, se recomienda un implante coclear, un dispositivo de mayor alcance que permite acceder a todos los sonidos.

fuente: infobae.com





No hay comentarios:

Publicar un comentario